LLEVABA SORPRESA

Era una noche de adolescencia, yo ya me había ido a dormir porqué llevaba 7 horas intentando pasarme una pantalla de un juego llamado XIII; por cierto impresionante. Creo que esa noche soñaba algo por el estilo que Casper me hacia daño, no os riáis porque ha sido un sueño que ha traumatizado mi infancia y ha marcado mi personalidad. A los niños les daba miedo la oscuridad, la soledad, los monstruos, el hombre del saco y a los más raros los payasos pues a mi Casper, creo que esta fobia me duró hasta los 15 años.

A las 4 de la mañana suena mi móvil, me extraño, ¿quien iba a ser a estas horas? Miro la pantalla pensado que si era Casper me triaba por la ventana mientras recitaba un padre nuestro, no fue así, resulto ser un colega con la que tenemos una relación casi de hermanos. Con voz de sobado le digo – Tío ¿que quieres ahora?- Escuché llantos, repetí -Yonki, ¿que quieres?- Más llantos, empecé a pensar que Casper me la estaba jodiendo y que primero se estaba empezando a cargar a mis seres queridos y colegas para agrandar mi sufrimiento. Después de unos segundos el me respondió -¡Colega!- Lo dijo llorando, yo le dije – ¿Que te pasa tío? Me estas cagando...- El me dijo- tengo que explicarte una cosa...-.

El me estuvo contando esa cosa con mucha precisión, realmente esa noche después de oír lo que me contó, no paré de reír durante los tres días siguientes y la fobia que tenia con Casper desapareció durante mas o menos 1 mes.

Lo que me contó mi amigo ese día no ha salido a la luz hasta ahora, de hecho esto es un estreno mundial del secreto de mi compañero. ¡Que se Joda! (risas maléficas)

Recordáis, esto va dirigido al público masculino nacido entre los años 85-91, cuando nuestros padres se iban a una cena o a dormir entonces nosotros llenos de desajustes hormonales íbamos delante la tele poníamos el PLUS codificado y mientras intentábamos descifrar lo que pasaba nos hacíamos un sube y baja, gallarda, manola, gayola, Irene mano va mano viene, 5 contra 1, entre otros.

Mi amiguete iba un paso avanzado, consiguió colocar la antena de tal forma y tocar algún que otro cable que le permitió poder escuchar, tener color y muchas menos rayas en la pantalla pero, por ir tan de listo el destino le jugó una mala pasada.

Me dijo que miraba una peli llamada “Vampiritas sorbesemen” si, sí muy desagradable porqué según el título no sorbían sangre sino s... ¡ahhhH! La cuestión es que el miraba la película y en una escena salía la vampiresa madre, él al ver ese pivón impresionante sacó el miembro y empezó a trabajar. Mientras estaba haciendo el 5 contra 1, la gran vampiresa madre encontró una presa y se empezó a sacar la poca ropa que llevaba, primero lo de arriba, imaginaros la cara de depravado de mi amigo, en ese momento la tía empezó a sorber para llevarse el alma de la víctima, después de unos segundos la chica se empezó a sacar el tanga y mi amigo estaba a punto de... sonreír, ya se entiende. El argumento por el cual mi compi me había llamado y estaba llorando era, al fin, porque esa gran vampiresa madre al bajarse el tanga resulto ser el GRAN VAMPIRO LOCAZA TRAVESTÍ y mi amigo envuelto por un ataque de homofobia adolescente se le bajo todo el temilla y se puso a llorar porque se había puesto morcillón con un hombre. Después de eso me llamo.

Mi personalidad estará marcada siempre por el hijo de puta de Casper el niño imbécil pero, una cosa que disminuye la importancia a mi trauma es que se que en el mundo hay muchos mas chavales traumatizados por cosas mas serias como el GRAN VAMPIRO LOCAZA TRAVESTÍ.